Recuperación capilar: así son los principales tratamientos contra la calvicie

La alopecia androgenética afecta al 45-50% de la población, si bien existen más de cien tipos de calvicie (areata, fibrosante, difusa, etcétera) que amplían este porcentaje. Además de la genética, otros factores causantes de este problema son una mala alimentación, el estrés, los desequilibrios hormonales y el maltrato capilar. Sea cual sea la razón, existen diversos tratamientos alopecia Vigo, Ciudad Real y de otras provincias que permiten recuperar el cabello.

 

Los medicamentos y la cirugía de trasplante capilar han demostrado ser eficientes a la hora de combatir diversas clases de alopecia. Dentro del primer grupo, el minoxidil en crema es una solución muy prescrita en centros y clínicas capilares, pues contribuye a retrasar la caída y a recuperar parte del cabello perdido en determinadas zonas. No obstante, su utilidad disminuye en pacientes con una pérdida severa de pelo.

 

Otro de los más demandados es el finasteride o dutasteride, disponible en pastillas que estimulan el crecimiento capilar y disminuyen la acción de los andrógenos sobre el cuero cabelludo. Salvo en mujeres de edad avanzada (la espironolactona es una mejor alternativa en su caso), el resto de grupos demográficos es compatible con este tratamiento, que pese a no ser una panacea milagrosa, ayuda a combatir el problema de la calvicie.

 

Por otra parte, la caída capilar puede revertirse con la cirugía de trasplantes de pelo. A grandes rasgos, este tratamiento se basa en la inserción de folículos en la raíz del cuero cabelludo, proceso que se acompaña de la ingesta de fármacos como los citados minoxidil o finasteride. Generalmente, estos folículos se extraen de la nuca del paciente.

 

Además de los trasplantes, los afectados de alopecia cuentan con una tercera solución: las infiltraciones capilares, un tratamiento alternativo consistente en la aplicación de vitaminas, minerales y aminoácidos con el objetivo de fortalecer los folículos pilosos y ralentizar su pérdida de densidad.